Entre los beneficiarios están productores de leche, fabricantes de uniformes escolares y pequeños emprendedores de la economía popular y solidaria.
Según información oficial, USD 23,8 millones fueron destinados a la alimentación escolar, mientras que USD 18,9 millones se dirigieron a proveedores de otros servicios, como la confección de uniformes, que recibió USD 5,8 millones.
El objetivo de estos pagos es garantizar la continuidad de estos servicios y brindar apoyo a los pequeños negocios que dependen de estos ingresos. Desde el Gobierno se ha señalado que continuará con la inversión social en beneficio de sectores vulnerables.
Proveedores del sector social recibieron pagos por un total de USD 42,7 millones, correspondientes a servicios prestados al Estado.
Fuente: el telégrafo
